
La rehabilitación cognitiva es una intervención terapéutica que busca mejorar o compensar las alteraciones en las funciones mentales producidas por lesiones cerebrales, deterioro cognitivo o enfermedades neurodegenerativas. Pero, ¿sabías que no todos los ejercicios de estimulación cognitiva son iguales? A continuación, te contamos qué tipos de actividades se utilizan y cómo ayudan a mantener y recuperar las capacidades mentales.
¿Qué es la rehabilitación cognitiva?
Es un proceso estructurado de ejercicios y técnicas que tiene como objetivo restaurar, compensar o mantener las funciones cognitivas afectadas, como la memoria, la atención, el lenguaje o las funciones ejecutivas. Esta intervención puede realizarse de forma presencial, digital o combinando ambas modalidades.
Tipos de ejercicios en la rehabilitación cognitiva
Ejercicios de memoria
- Recordar listas de palabras o imágenes.
- Juegos de asociación de conceptos.
- Ejercicios de evocación de recuerdos personales.
Estos ejercicios buscan mejorar tanto la memoria inmediata como la memoria a largo plazo.
Ejercicios de atención y concentración
- Detección de estímulos visuales o auditivos.
- Tareas de búsqueda de errores.
- Actividades que requieren mantener la atención sostenida durante un tiempo prolongado.
Son fundamentales para personas que presentan dificultad para mantener el foco en una tarea.
Ejercicios de funciones ejecutivas
- Resolución de problemas.
- Planificación de tareas.
- Actividades de razonamiento lógico.
Estas actividades ayudan a reforzar la capacidad de organizar, tomar decisiones y resolver situaciones complejas.
Ejercicios de lenguaje
- Denominación de objetos o imágenes.
- Comprensión lectora.
- Creación de frases o historias a partir de estímulos.
Son esenciales para personas que presentan afasias o dificultades en la expresión y comprensión verbal.
Ejercicios de orientación espacial y temporal
- Identificación de fechas, lugares y situaciones.
- Navegación por entornos virtuales (con tecnologías como la realidad virtual).
- Actividades para reconocer la posición en el espacio.
Este tipo de ejercicios es clave en casos de desorientación, como ocurre en enfermedades como el Alzheimer.
Tecnología y rehabilitación cognitiva: una combinación ganadora
No todas las personas necesitan trabajar las mismas áreas ni al mismo ritmo. Plataformas como Gradior Suite permiten diseñar programas de rehabilitación cognitiva personalizados, adaptando la dificultad y el tipo de ejercicio según las necesidades de cada usuario.
Gracias a las herramientas digitales, los ejercicios de rehabilitación cognitiva son cada vez más atractivos, accesibles y eficaces. El uso de dispositivos como tablets, pantallas táctiles o gafas de realidad virtual potencia la motivación y facilita la monitorización del progreso.