
Estimulación multisensorial vs. estimulación cognitiva: diferencias clave en neurorehabilitación
En el campo de la salud mental y neurológica, los enfoques terapéuticos evolucionan constantemente. Dos de las técnicas más empleadas son la estimulación multisensorial y la estimulación cognitiva, y aunque pueden complementarse, tienen objetivos y métodos distintos.
¿Qué es la estimulación cognitiva?
La estimulación cognitiva se centra en ejercitar funciones mentales superiores como la memoria, la atención, el lenguaje o el razonamiento. Su objetivo es mantener o mejorar el rendimiento cognitivo, especialmente en personas con deterioro leve o enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer.
Se lleva a cabo mediante ejercicios estructurados, ya sea en formato papel, digital o en sesiones guiadas por profesionales.
¿Qué es la estimulación multisensorial?
Por otro lado, la estimulación multisensorial busca activar los sentidos (vista, oído, tacto, olfato, gusto y propiocepción) mediante entornos controlados, como salas Snoezelen o actividades sensoriales. Es especialmente útil en personas con discapacidades severas, trastornos del desarrollo o demencias avanzadas.
Su finalidad es reducir la ansiedad, mejorar la comunicación no verbal y favorecer la conexión emocional con el entorno.
Diferencias clave entre ambas
Aspecto | Estimulación Cognitiva | Estimulación Multisensorial |
---|---|---|
Objetivo | Mejorar funciones mentales | Generar bienestar sensorial y emocional |
Público | Personas con deterioro leve o moderado | Personas con deterioro severo o discapacidades |
Actividades | Ejercicios mentales, juegos, tareas | Luces, sonidos, texturas, aromas |
Tipo de intervención | Estructurada y dirigida | Más libre y experiencial |
En Gradior Suite, adaptamos los programas terapéuticos según las necesidades de cada persona. Entender estas diferencias permite diseñar intervenciones más efectivas y humanas.